31 Mujeres: María la Judía

31 Mujeres: María la Judía

En el siglo IV, un alquimista de Alejandría, Zósimo de Panópolis, recuperó parte de la obra de una mujer que había vivido uno o dos siglos antes que él y la incluyó en una recopilación de saberes antiguos junto con otros sabios de la alquimia. En el siglo VIII aparece citada por un cronista de Bizancio y el árabe al-Nadim también inmortalizó su nombre en el siglo IX. Todos ellos nos hablan de una mujer de la que se sabe muy poco de su existencia.

María la Judía, María la Hebrea o Miriam la Profetisa fue el primer nombre femenino relacionado con los saberes de la alquimia. Se le atribuye el establecimiento de los fundamentos teóricos y prácticos de la alquimia, la precursora de la química moderna en el mundo occidental.

María la Judía habría vivido en una fecha desconocida entre el siglo I y el siglo III de nuestra era. Autora de varios escritos científicos, los cuales no se han conservado en su formato original, María está considerada como una de las primeras alquimistas de la historia. Entre sus inventos, destacan varios artilugios destinados a mejorar la destilación de sustancias químicas, como el tribikos o el kerotakis. También fue la creadora del procedimiento de calentamiento de sustancias de manera uniforme conocido popularmente como baño María y que aún a día de hoy se utiliza en laboratorios químicos. Y en muchas cocinas.

 

  

Kerotakis

El kerotakis es el más importante de los inventos de María la Judía, es un aparato de reflujo usado para calentar sustancias utilizadas en la alquimia y recoger sus vapores. 

Su obra

Su principal obra conocida es Extractos hechos por un filósofo cristiano anónimo, o Diálogo de María y Aros, en donde están descritas y nombradas las operaciones que después serían la base de la alquimia.